Camina por la calle con los ojos fijos hacia delante. Con cada paso que da, deja en su camino talleres mecánicos y desarmadurías. Mientras recorre este trayecto se escuchan risas; los mecánicos que están en la vereda susurran palabras de burla. Algunos, incluso, gritan hueco y maricón. Según la Municipalidad de Santiago, más del 80% de los que trabajan en 10 de Julio son hombres. Con ese típico estereotipo del mecánico macho, fuerte y viril. Es difícil no imaginarse que si un homosexual camina por las calle, estos hombres no lo molestarán.
La Primera Encuesta de Cohesión Social en America Latina (EcosociAL) es una de las más importantes hechas en 2007, con respecto a los alcances y explicaciones de la discriminación que afecta a las minorías sexuales en Chile. Según esta encuesta, la historia de nuestro país ha demostrado que en Chile cada día es menor la homofobia, pero lo concreto es que sigue estando por debajo de los reales cambios experimentados por el resto de America Latina, donde como promedio, el nivel de intolerancia frente a los homosexuales es de 25%, dos puntos porcentuales menos que en nuestro país.
El machismo, todavía predominante en Chile, derivó nuevamente en que las mujeres, con un 23% de intolerancia a los gays, sean más comprensivas que los hombres, con un 31%. La investigación demostró también que ésta es mayor en regiones que en Santiago y entre las personas más adultas que entre los jóvenes. En la capital, al 26% de la población le molestaría que su hijo o hija tuviera un amigo o amiga homosexual, mientras que en regiones la cifra sube dos puntos. Esto se explica porque el mayor debate sobre la situación de las minorías sexuales se ha concentrado históricamente en Santiago, con la respectiva implementación de políticas públicas favorables que ello ha acarreado.
“Como cada día las nuevas generaciones van aumentando su nivel de aceptación, se va generando un mayor respeto por la diversidad sexual a nivel nacional. Esto garantiza un mejor futuro, porque esos jóvenes, serán las nuevas autoridades del país”, argumenta Juan Hernández, Director del Área de Derechos Humanos del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual, Movilh. “Es por esto que la candidatura de Gonzalo Cid abre una ventana para que las minorías sexuales puedan por fin ser escuchadas en el gobierno”, recalca.
Homosexualidad y polítca.
Específicamente en el barrio 10 de Julio, ubicado en la comuna de Santiago Centro, los mecánicos no saben que decir cuándo se les pregunta sobre su tolerancia a los homosexuales. Imágenes de los personajes Tony Esbelt o de Yerko Puchento son las primeras que vienen a su cabeza. Los actores que encarnan a estos personajes, caricaturizan a los homosexuales y los dejan en ridículo. Todas estas creencias colectivas son alimentadas y divulgadas por los medios de comunicación, los que se burlan el tema, satirizándolo. Y dejando, en la mente de los chilenos, un prejuicio al gay.
“Todos los fletos son unas locas, les encanta andar luciéndose y haciendo escándalos. En la tele siempre muestran que hacen shows y que son súper promiscuos. Acá en el barrio nos reímos de ellos, son divertidos. Pero tampoco los molestamos tanto. Mientras no se metan conmigo todo bien”, dice Jimmy Forde, dueño del Comercial Colonial. Una botillería ubicada en 10 de Julio con Arturo Prat.
Es difícil imaginarse, entonces, que con esta mentalidad; un homosexual que se postula a concejal, pueda ser elegido. Pero sí existe un candidato. Gonzalo Cid, Ingeniero Comercial, se está postulando en Santiago, con el respaldo del Movimiento Unificado de Minorías Sexuales (MUmS). Movimiento del cual forma parte activamente desde 1999 y del que hace varios años es uno de sus principales dirigentes.
“La postulación surge como una iniciativa del MUmS, en la cual la idea era poder llevar una candidatura para colocar los temas por los cuales el movimiento viene trabajando hace mas de 17 años en el tapete de discusión política contingente”, comenta Gonzalo Cid. Su idea es ganar este espacio para continuar con la difícil lucha por los derechos de los gays, lesbianas, transexuales y bisexuales del país.
Algunos de los temas que quiere discutir son:
- La derogación al artículo 365 del Código Penal, que califica a los homosexuales como delincuentes y que sanciona las relaciones sodomíticas, sean estas efectuadas con mutuo consentimiento y por mayores de edad en lugares públicos o privados.
- La opinión de la Iglesia, al señalar que acepta los homosexuales siempre y cuando no practiquen las relaciones sexuales. Dando su visión ancestral respecto a ellos: la de pecadores.
- La ridiculización o caricaturización de las demandas de los homosexuales organizados, contribuyendo a aumentar o a generar anticuerpos ellos.
Jactarse de su condición sexual para hacer política, es un arma de doble filo. Pero para Gonzalo este es un tema primordial. “El decir que soy gay es relevante, los temas que nos interesa mostrar son los que tienen relación con la discriminación que hay en la comuna, el poco respeto a la diferencia, el resaltar la diversidad, y el fomentar la participación como elemento esencial para resolver una serie de problemas que tiene la comuna”.
La elección de Santiago para candidatizarse, también tiene una razón estratégica. Aparte de ser donde el MumS está ubicado, se elije porque ha sido donde han trabajado hace años, con los vecinos y vecinas. Además que Gonzalo Cid trabaja en forma personal en esta comuna y es emblemática para país. Por lo que significa ser el lugar donde se encuentra el poder político del país.
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